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19 diciembre, 2014

Contagiar al entorno

Planta San Juan organizó la jornada del Día de Hacer el Bien en torno a la puesta en valor del Club Andino Mercedario. Más de 250 personas se involucraron en la actividad.

El Club Andino Mercedario se encuentra al pie de la cantera, en el lugar que los sanjuaninos llaman “El Jardín de los Poetas”. La edificación que hoy es su sede supo ser una escuela albergue y al estar tanto tiempo abandonaba necesitaba reparaciones importantes que iban desde pintura hasta movimientos de suelo para recuperar su antiguo parque.

“La elegimos para llevar adelante el Día de Hacer el Bien por tres motivos fundamentales. El primero por su proximidad, el segundo porque ya estamos trabajando fuertemente con generar capacidades instaladas en nuestra comunidad por el cierre de la cantera; y el tercero porque hacen foco en el deporte”, cuenta Mario Rodríguez, analista de Administración y responsable de toda la logística de ese día.

El Club Andino Mercedario se dedica al andinismo, trecking y toda actividad deportiva en la montaña. “Fue emocionante y estamos muy agradecidos por todo lo que hicieron los voluntarios, cómo se involucraron y generaron esta relación que continuará en el tiempo”, se emociona aún hoy Sebastián Aguiar, presidente de este Club que cuenta con 200 socios y es reconocido a nivel nacional por el nivel de deportistas con los que cuenta.

Veinte días antes del Día de Hacer el Bien se comenzaron con las tareas con el fin de habilitar la puerta principal al predio y al inmueble. Se hicieron las evaluacSan Juan (3)iones de los trabajos a realizar y se acordó que se cambiaría la instalación eléctrica, se pintarían las dos habitaciones más grandes, que servirán para dar hospedaje a los futuros visitantes, baño, cocina y salón de usos múltiples. Para la parte exterior, se diseñaron y pintaron tres murales alusivos a la actividad del Club que fueron pintados por la hija de un voluntario, un dibujante y alumnos de una escuela de arte.

La Municipalidad se encargó de la poda y arreglo de los árboles, el proveedor FCD realizó los movimientosde tierra para nivelar el terreno y un grupo de voluntarios repararon las telas que sirven para cerrar el perímetro. “Este fue mi tercer año y el primero que integro el Grupo de Voluntarios y la verdad que fue increíble porque además de colaborar sentís que también depende de vos que todo salga como lo esperamos”, enfatiza Emiliano Frías, del área de Mantenimiento Eléctrico. Uno de los problemas del año pasado fue que al no estar identificados los voluntarios referentes la gente no sabía a quién preguntarle, o a dónde ir una vez que terminaba. “Al identificarnos le facilitás al otro el hacer, saben a quién dirigirse, con lo cual se sienten útiles al mismo tiempo que te organizás mejor”, explica quien ingresó a la empresa hace tres años y siente una gran satisfacción por contar con esta posibilidad.

Por otro lado, profesores del Club Andino visitaron Planta San Juan con el fin de brindarles a los colaboradores de Loma Negra una capacitación sobre el trabajo en altura. “Fue una vivencia de ida y vuelta que nos hizo bien a todos–cuenta Raúl Delgado, del área de Mantenimiento Mecánico-. Y lo bueno de este Día de Hacer el Bien fue que participó una gran cantidad de gente, sobre todos jóvenes, y pudieron vivir la exSan Juan (1)periencia de que si todos trabajamos juntos las cosas se logran”.

Al mediodía, cuando todo estaba casi terminado más de 250 personas disfrutaron de un choripán y del asado a la cruz.“Estábamos dentro de este Jardín de los Poetas donde concurre mucha gente los fines de semana, la gente pasaba y se sumaba y era muy bueno porque no importaba si pertenecían o no a la empresa. Todos trabajaron para que este Club tenga su hospedaje y su lugar de encuentro”, concluye Rodríguez, responsable junto a Delgado del gran asador de ese domingo de agosto.