Novedades

¡COMPARTILO!

Sin categoría
6 abril, 2012

El voluntario del mes – A puro corazón

Oscar Mauricio Vega es Operario de Mantenimiento Eléctrico de Planta San Juan pero su tiempo libre lo dedica a lo que ya es casi una pasión: ayudar a los que más lo necesitan. Es que Oscar fue uno de los primeros en sumarse al Programa Voluntarios en Acción, y siempre se ha destacado por su dedicación en actividades solidarias, brindando su tiempo y esfuerzo con una gran impronta de compañerismo. Así lo cuenta él mismo: “Participé desde un primer momento, sobre todo cuando las acciones de voluntariado se realizan los fines de semana ya que, dado que tenemos turnos rotativos, a veces no me coinciden los horarios”. Pero, a pesar de los malabares que ha tenido que hacer con su agenda, Oscar siempre está dispuesto a ayudar. “He colaborado pintando y arreglando escuelas y clubes en localidades como Pocito, Rivadavia o La Bebida, pueblos que están muy cerca de nuestra planta”. Sin embargo, esta pasión por contribuir positivamente con su comunidad, nació mucho antes que el Programa de la Fundación Loma Negra: “Mis padres son adventistas, con lo cual en mi casa siempre se pregonó el amor por el prójimo y la solidaridad. Gracias al Programa Voluntarios en Acción fue mucho más fácil ayudar dado que la empresa contribuye con los materiales que, muchas veces, de otra manera sería imposible conseguir”, explica Oscar.
En cuanto al motor que lo impulsa a destinar tanto tiempo y energía, nuestro voluntario es claro: “La satisfacción es enorme, no es lo mismo estar cansado por hacer deporte o por trabajar, es muy diferente. Cuando un niño te mira y se le iluminan los ojos porque le regalaste ropa o juguetes o lo ayudaste con su escuela, te colma el corazón, si bien te sentís físicamente agotado tenés una felicidad enorme. Me encanta poder hacer lo que hago”.
Y no está solo en la tarea, cuando puede, su esposa Fernanda también lo acompaña en estas actividades solidarias: “Nos ponemos ropa de trabajo, agarramos la vianda y nos vamos a ayudar”.
Oscar asegura que, una vez que uno comienza a ser voluntario, no puede dejar de hacerlo y más cuando se actúa desde una empresa que tiene un verdadero compromiso social con su comunidad.