Programa Compromiso

Transformar para ayudar

“Este año los vecinos del Barrio 9 de Julio experimentaron el voluntariado junto a la Fundación Loma Negra. Estamos muy contentos porque muchos de ellos eran jóvenes interesados en colaborar con su comunidad”, enfatiza Rosa Quispe, presidenta de la Comisión Vecinal del Barrio 9 de Julio, ubicado en el sur del partido bonaerense de San Nicolás. Quispe también es enfermera del Centro de Salud, aledaño al Salón de Usos Múltiples que se acondicionó el 28 de octubre durante el Día de Hacer el Bien (DHB).

El Barrio 9 de Julio cuenta con varios sectores donde viven familias en situación de vulnerabilidad y es una población que en los últimos años ha experimentado un crecimiento demográfico. Allí, el CIVICO Ramallo, junto con seis aliados y 105 voluntarios, realizó la puesta en valor del centro como actividad principal del DHB. Se pintó el interior y exterior del edificio, se repararon las filtraciones de agua en el techo, y se acondicionó el tanque de agua.

Junto con los trabajos de refacción edilicia, también se adecuaron las instalaciones eléctricas y se cambiaron las puertas y marcos de los dos baños. A su vez, hubo trabajos de poda y jardinería para embellecer la fachada externa del predio. Durante la jornada, se organizaron actividades para los más chicos con inflables y se sirvieron hamburguesas.

“El DHB es una actividad muy importante porque no sólo se colabora con una comunidad, si no que es algo que se hace en familia. En este sentido veo mucha solidaridad de mucha gente demostrando que de manera organizada se puede ayudar”, explica Juan Pablo Juliá, Coordinador de Administración y Recursos Humanos de Planta Ramallo.

El centro es usado por los habitantes de 9 de Julio y de otros barrios aledaños de bajos recursos. Allí se organizan todo tipo de actividades, algunas en conjunto con el Municipio de San Nicolás, como actividades artísticas, un programa de teatro que lleva a cabo obras para niños y familias, también hay clases de guitarra y danza folclórica y hasta un programa de alfabetización para niños y adolescentes. “Es un lugar que tiene mucho potencial para nuestra comunidad y que usamos todas las semanas, sirve hasta como centro para alojar a personas evacuadas cuando las lluvias fuertes inundan el barrio. Además, estamos planificando crear una biblioteca permanente dentro del centro, para incentivar la lectura en los niños de la zona”, detalla Quispe.

“Este fue mi tercer DHB, y siempre es una actividad sumamente importante ya que los vecinos están felices cuando saben que vamos a mejorar un sector de su comunidad. En este caso, se hicieron más cosas de las que ellos pensaron y estaban sorprendidos cuando terminamos y vieron los resultados, fue sumamente positiva”, cuenta Juliá, quien asistió junto con uno de sus hijos.

Acción: Acondicionamiento del Salón de Usos Múltiples

Voluntarios internos: 14

Voluntarios externos: 91

Beneficiarios: 400